jueves, 27 de febrero de 2014

LA CAMPANA EN EL JARDÍN DEL PANTEÓN NACIONAL DE COLOMBIA

En pasados días visitamos el Panteón Nacional de Colombia, ubicado en la iglesia de la Veracruz. Esta iglesia, contigua a la de San Agustín se encuentra en la carrera séptima con la calle 16.


 
La capilla original se construyó en el siglo XVI, pocos años más tarde de la fundación de la ciudad. Se inauguró en 1549, siendo unas de las primeras construcciones de Bogotá.
 
Entre junio y noviembre de 1816 unos 80 próceres de la independencia de Colombia, fusilados durante la reconquista española, fueron inhumados en esta iglesia ya que la Hermandad de la Veracruz era la encargada de asistir a los ajusticiados y darles sepultura en la fosa de esta iglesia. Entre ellos se encuentra la famosa Policarpa Salavarrieta.
 
En esta visita observamos una campana depositada en el jardín que despertó nuestra curiosidad, ya que una gran parte de las campanas de origen español, aunque fuesen de procedencia moderna, suelen proceder de maestros fundidores de la comarca de Transmiera, en Cantabria.

La campana recoge la siguiente inscripción: MOISÉS DÍEZ. PALENCIA. ESPAÑA.  

 908 A        AÑO: 1910
 
 
 
Campana y detalles de la misma
 


La campana está quebrada en su boca, siendo ésta posiblemente la razón de haber sido desmontada y depositada sobre  el jardín.
 
Indagando quien era este fundidor ya desaparecido, efectivamente Moisés Díez fue un maestro fundidor de reconocida fama, con taller en Palencia, donde se han catalogado unas 74 campanas, todavía existentes, salidas de su taller entre 1900 y 1929 del siglo pasado. En la relación aparecen dos vendidas en Santiago de Chile. También era fabricante de relojes de torre.
 

 

Anuncio propagandístico de la fundición de Moisés Díez


Nos quedaba conocer si efectivamente este maestro descendía de los afamados maestros campaneros de Cantabria, que trasladaron  sus talleres a Castilla y León y en las afueras de Madrid, para atender el extenso patrimonio religioso existente.

 
La duda nos la despeja Luis  de Escallada González, que en su monografía  titulada: Breve guía de Maestros fundidores de campanas de Cantabria, sitúa el origen de Moisés Díez ,en el  pueblo de Ajo, perteneciente al ayuntamiento de Bareyo, en Cantabria.
 

martes, 25 de febrero de 2014

JOSEF CUATRECASAS, INSIGNE NATURALISTA ESPAÑOL EN COLOMBIA

Para los que no somos del gremio, como es mi caso, este ilustre botánico catalán  era  un desconocido. La primera toma de contacto con este personaje fue a través de una exposición que la Universidad Nacional de Colombia organizó, titulada: Josef Cuatrecasas y el herbario Valle, en su sede de Palmira.
 
La curiosidad me lleva a conocer más a este personaje de una dilatada carrera científica. Nació en Campodrón, Gerona, en 1903, se licencia muy joven en farmacia, doctorándose en 1928 con una tesis de contenido botánico. En  1931, obtiene la cátedra de Botánica Descriptiva de la facultad de farmacia, en la Complutense de Madrid.
 
En 1932 toma contacto con Colombia al ser comisionado del Gobierno Español en el centenario de José Celestino Mutis. Impresionado por la diversidad de la flora colombiana, elige a este país como centro de sus investigaciones.  En esos años, el Jardín Botánico de Berlín financiaba las expediciones que  hacia durante algunos meses, para el estudio de la flora colombiana.
 
Cuatrecasas catalogando plantas sobre el terreno
Durante la guerra civil española ejerció de Director del Jardín Botánico de Madrid. Durante ese periodo rescató para su estudio los herbarios derivados de las expediciones históricas, como la de Sessé y Mociño, o las propias recolecciones de Mutis, derivándolas a especialistas transatlánticos cuando era necesario. Se ocupó de que las láminas de Mutis fueran evacuadas de Madrid a la vez que los fondos pictóricos del Prado.
 
Al finalizar la guerra civil decide abandonar España, manteniendo una posición muy crítica  e irreconciliable con la dictadura franquista; decide no volver  España mientras gobierne el dictador. En ese momento se instala en Colombia ejerciendo como profesor en la Universidad Nacional de Colombia en la sede Bogotá y en la facultad de Agronomía de la Universidad de Palmira, hasta 1947.
 
Hoja de mano de la exposición



En ese año se trasladó a Estados Unidos, donde estuvo vinculado, con diversos cargos y financiación de la National Science Foundation, al Chicago Natural History Museum, primero, y a la Smithsonian Institution, después. En esta última trabajó, como investigador asociado, desde 1955 hasta 1977, y desde esa fecha hasta su muerte, como emérito. En 1953 el gobierno de EE.UU le concede la nacionalidad americana.
 
En lo que respecta a sus trabajos en Colombia dejó un legado de  25 diarios y 12 cuadernos de notas detallando  día a día sus expediciones, los preparativos para los viajes, anotaciones científicas, sus aventuras y técnicas de acampada, e incluso las medicinas que usaba para prevenirse de malaria, el reumatismo o  la disentería.
 
 
También dejó cerca de 20.000 fotografías. Retrató a más de 16 grupos indígenas: Carijonas, Cholos, Cochas (Kamsá), Cofanes, Cubeos, Guananos, Guayaberos, Inganos, Kogis, Paeces, Tucanos, Tunebos, Uitotos, Yurutíes y otros.
 
Durante sus múltiples expediciones entre 1932 y 1979, descubrió cerca de 3.308 especies, subespecies o variedades nuevas para la ciencia. Publicó 262 artículos científicos, y es autor o co-autor de dos subtribus y 41 géneros.
 
Se especializó en la flora de los páramos, sobre todo  en los frailejones. Los frailejones son las plantas emblemáticas de los páramos y sólo existen en Colombia, Venezuela y norte de Ecuador. El nombre de frailejón se debe a la apariencia de fraile corpulento que tienen cuando se ven desde lejos entre la niebla.

 
Frailejones sobre un páramo
 
En 1983 fue nombrado director honorario del Real Jardín Botánico de Madrid. En sus últimos años legó su extensísima colección de tipos nomenclaturales al propio  Jardín Botánico y su biblioteca al Instituto Botánico de Barcelona, una institución municipal de enorme solera, donación con la que quiso subrayar su condición de catalán que amaba su tierra.
 
Muere en Washington en 1996, cuando tenía 93 años. Actualmente sigue estando  considerado como una eminencia mundial en el estudio de la flora tropical de los páramos.

martes, 18 de febrero de 2014

VISITA A LA TUMBA DE CARLOS PIZARRO

Me he acercado al cementerio central de Bogotá ubicado en la Avenida del Dorado con la carrera 20. Este cementerio, inaugurado en 1836, concentra el mayor número de personalidades colombianas sepultadas, con la presencia de más de una docena de ex presidentes de la república, próceres  de la independencia, escritores, poetas y político. 
 
Visitar el cementerio central es darte de bruces con la difícil historia civil y política de Colombia. Te encontrarás con importantes personajes asesinados como Luis Carlos Galán Sarmiento, el ajusticiado José Raquel Mercado o el mismo Carlos Pizarro.
 
Me centraré en la figura de ese ultimo. Carlos Pizarro fue el máximo comandante del M-19 entre 1896 y 1990. El movimiento 19 de abril fue un movimiento insurgente colombiano, nacido a raíz de un supuesto fraude electoral en las elecciones presidenciales de 1970. El M-19 se definía como guerrilla urbana, nacionalista, bolivariana y socialdemócrata.
 
Tras su desmovilización se convirtió en un movimiento de izquierda  conocido como Alianza Democrática M-19 , que ganó importante respaldo popular y fue uno de los  partidos constituyentes de 1991. Desapareció a mediados de la década de los 90 , integrándose algunos de los miembros, que todavía vivían, en otros partidos.
 
Carlos Pizarro tuvo un protagonismo fundamental en el proceso de paz mantenido con el Gobierno de Virgilio Barco, proceso que duró casi dos años, para posteriormente capitanear la entrega de armas, la desmovilización de la guerrilla y la creación del movimiento político  ya citado.
 
 
Imagen de Carlos Pizarro


Gozando de gran popularidad el movimiento político surgido del proceso de paz, es postulado como candidato a las elecciones presidenciales de 1990. En plena campaña electoral y a pesar de ser uno de los personajes más custodiados del país, es asesinado por un sicario en pleno vuelo de Avianca, cuando lo hacía  desde Bogotá a Barranquilla. La auditoria intelectual se atribuye, según sus memorias, a Carlos Castaño, jefe paramilitar de las autodefensas unidas de Colombia.

La Fiscalia General de la Nación de Colombia declaró este hecho como un delito en contra de la humanidad, logrando que las investigaciones sobre este hecho no prescriban por causa de vencimiento de términos.

El cuerpo de Carlos Pizarro reposa bajo una aparatosa lápida, donde tras las flores de sus admiradores, se visualiza la espada de Simón Bolívar que ayudo a robar en el año 73. Pizarro se sorprendería hoy día si pudiera comprobar que sus seguidores y devotos de su obra, se acercan  a su tumba para darle gracias por favores concedidos o por aquella intercesión ante no se sabe muy bien quién. La lápida acoge en sus alrededores docenas de los mensajes grabados en planchas de mármol.
 
 
                                                                         Tumba de Carlos Pizarro  
Entre ellas hemos encontrado un mensaje de un ciudadano catalán. Sabemos por algunas entrevistas , que una de las hijas de Carlos Pizarro, la que mantiene de forma más decidida la memoria de su padre, vivió exiliada bastantes años en Barcelona, donde se hizo diseñadora de joyas.
 
 

 

 
Para conocer más a este personaje se puede entrar  en: www.carlospizarro.com



domingo, 16 de febrero de 2014

EL CLAUSTRO DE SAN AGUSTÍN

Ayer salimos a dar un paseo por el centro histórico de Bogotá: Plaza Bolívar y alrededores, lo que rodea a la carrera séptima que es peatonal y la zona de la  Candelaria. Es la parte de la ciudad  donde se concentra  la parte histórica.
 
Aunque ya lo conocíamos visitamos de nuevo el claustro de San Agustín, un viejo edificio colonial  que años atrás albergo el Museo de Artes y Tradiciones Populares  y que actualmente es la sede del Sistema de Patrimonio Cultural y Museos de la Universidad Nacional de Colombia. La mayor universidad pública colombiana.  
 
Este claustro fue construido entre 1733 y 1744 y desde ese tiempo ha pasado por diversos avatares; fue colegio seminario, Universidad de San Nicolás de Barí, cuartel de alojamiento de diversos  batallones, tanto en la época del virreinato como en la republicana. Ya hemos dicho que últimamente  también fue sede de un museo. Se ubica en un costado de la Casa de Nariño, en la carrera octava con la calle séptima.
 

Detalles del Claustro de San Agustín
 
Lo que le hace atractivo la vista a claustro actualmente, bajo la administración de la Universidad Nacional,  es que aparte de visitar el edficio puedes verte 5 o 6 exposiciones a la vez, sobre temáticas muy diversas. Son exposiciones  muy sencillas pero muy didácticas. Nosotros tuvimos oportunidad de ver las tituladas : 
 
-  Elementos de un crimen
- Minerales y minería en Colombia
- Gliptodonte: visiones a través del arte
- Presencia negra en Bogotá
- Un álbum fotográfico.
- Colombia, un cielo por descubrir
 
Estas exposiciones son itinerantes ya que también se exponen en las diferentes sedes de la Universidad Nacional tiene a lo largo del país. Para acceder a la programación y a la itinerancia de más de una quincena de ellas,  deben entrar en el siguiente enlace:  http://www.museos.unal.edu.co/
 
Los catálogos muy sencillos pero maquetados con mucho gusto, son unos desplegables de 16 paginas denominadas hojas de mano .
 

Hoja de mano de la exposición sobre José Jerónimo Triana

Esta es la hoja de mano de la exposición dedicada al insigne botánico colombiano José Jerónimo Triana, continuador de los trabajos de la expedición científica de José Celestino Mutis.  

Para acceder al original de la hoja de mano pinchar el siguiente enlace:  
 


 

sábado, 15 de febrero de 2014

ADIÓS A MADRID

Ayer dejé,  creo que definitivamente, Madrid. Llegué a la ciudad hace algo más de 13 años por motivos laborales. Trabajé durante 24 años en la fábrica de cables de comunicaciones que, Standard  Eléctrica inicialmente y Alcatel, posteriormente, tenía en Maliaño, Cantabria.

Después esta misma empresa me envió a  Colombia y a  Venezuela para trabajar en proyectos de comunicaciones. A la vuelta estuve un año en el país vasco para recalar, finalmente, en Madrid en el año 2000. La empresa me destinó a trabajar en la sede central de la compañía, en las oficinas de la calle Ramírez de Prado nº 5. 


En estos trece años largos he vivido siempre en la misma casa. Un pequeño apartamento  en la calle Cristóbal Bordíu 48, perteneciente al distrito de Chamberí. Esta calle es paralela por el norte a la de Ríos Rosas y perpendicular a Nuevos Ministerios, por su parte trasera. Su ubicación era muy cómoda para salir con el coche hacia el norte y el noroeste. A Cantabria y, algunas veces a Galicia, es dónde más viajábamos. También lo era para coger el metro hasta  la T-4 para nuestros vuelos transoceánicos. 

Fachada de la casa

El distrito de Chamberí es uno de los distritos perteneciente a la almendra central de Madrid, próximo al centro histórico de la ciudad. Es un distrito de clases medias y  gentes de edad avanzada,  lo que le confiere el  carácter  de distrito tranquilo.

La casa tiene una fachada muy bonita, a pesar  de tener casi 100 años. Fue construida por un arquitecto  guipuzcoano de nombre Fausto Gaiztarro y está fechada en 1930, tal como recoge una placa adosada a la jamba derecha del portal.

Placa alusiva al arquitecto

Aunque he nacido y  vivido muchos años en Santander;  una ciudad de 200.000 habitantes y posteriormente en un pueblo del Valle del Nansa, de 60 vecinos,  llamado Cades, donde estoy empadronado y pago mis impuestos, no deja de tener su gracia vivir a caballo entre  dos poblaciones que oscilan entre los 60 y los 6,5 millones de habitantes.  Sobre todo desde finales del 2003 que deje de trabajar, al prejubilarme.

No descubro nada si digo que Madrid es una ciudad acogedora, con una enorme influencia cultural, con importantes museos de talla internacional y con una vida social importante. Es  muy visitada por turistas,  tanto nacionales como extranjeros. Es la ciudad donde se cuecen las habas en nuestro país

Todo ello a pesar que en los últimos años,  tanto a nivel autonómico como municipal, ha estado gobernada y lo sigue estando por los llamados liberales de mamandurria, que con muy poca decencia y vergüenza, han cometido todo tipo de tropelías y han  emponzoñado  las instituciones públicas madrileñas. Ojala la justicia sea capaz de hacer bien su trabajo y liberar a los madrileños de todos estos  sujetos. También, tienen que poner lo suyo los votantes en los futuros procesos electorales, mandándoles a la oposición.

Abandono  Madrid para residir una temporada en Bogotá,  ciudad en la que viví  algún tiempo en 1996 y que, a partir de allí, he pasado por ella una docena de veces. El motivo del traslado es para  acompañar a mi mujer que trabajará en la ciudad, ahora que el país en su conjunto es admirable por sus niveles de crecimiento económico y de actividad pública.

Con este blog pretendo escribir las experiencias en este país, así como la de los viajes que realice por la región. Es mi compromiso.